Eran los favoritos por plantilla, y se tenía que notar en el campo. El Borussia Mönchegladbach seguirá en la élite del futbol alemán tras empatar 1-1 en el campo del Bochum y hacer bueno el gol del belga Igor de Camargo en la ida. Pero no fue tarea fácil ni mucho menos ya que el Bochum le complicó la vida durante más de 70 minutos. Con el Rhurstadion repleto como pocas veces se puede ver, la afición azulada alentó a los suyos desde el inicio con el objetivo de igualar cuanto antes la desventaja del partido de ida.
Salió en tromba el conjunto local y poco tardó el primer serio aviso que, al igual que en la ida, llegó en un saque de esquina. Maltritz remató al travesaño en el minuto 4 de partido tras superar al Jantschke. El Bochum mostraba mayor presión y las líneas más adelantadas, por lo que el gol se preveía que llegaría pronto. No se hizo demorar y a los veinte minutos de partido, una gran jugada individual de Christoph Dabrowski la terminó culminando, desgraciadamente para sus intereses, Nordtveit en su propia puerta. Se desataba la locura en las 25.000 gargantas de la afición local que veían más cerca el sueño de regresar a primera un año justo después de su descenso a segunda.
El gol no obstante, desperezó al conjunto de Favre que poco a poco fue llegando más a la portería de Luthe. Cerca del descanso, Arango sirvió uno de sus centros para que Idrissou rematara a placer, pero el esférico se marchó al palo. El delantero camerunés empezaba a participar en el juego de ataque y sus asociaciones con Reus dieron fruto en el minuto 55, pero el gol fue anulado por fuera de juego. No fue anulado sin embargo el empate, que llegaría en el 72 en una preciosa jugada colectiva de combinación que Reus finalizaría con un golpeo sutil. Era el empate y el final del sueño para el conjunto de la Renania. Como detalle desagradable, Reus mandó callar a la afición local en su celebración.
Hasta el final, el Gladbach no pasaría más apuros y la euforia llegó en las 3.000 personas que abarrotaban la esquina de la afición visitante. Se salva el Gladbach, quien lo hubiera dicho hace un mes cuando el equipo estaba desahuciado y colista en la tabelle. Así, Dante tuvo que cumplir su promesa, y su particular peinado ha pasado a mejor vida. Enhorabuena Borussia Mönchengladbach y suerte al Bochum en otra andadura por segunda.
Resultado final: VFL Bochum 1-1 Borussia Mönchengladbach
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