Una segunda vuelta infernal

Cuesta creer el descenso del Eintracht, y más si se ven las cifras al término de la primera vuelta, pero una segunda mitad de temporada con tan solo ocho puntos de 51 posibles les ha hecho caer seis años después en segunda. Un conjunto histórico que ha llegado en los años sesenta a una final de la copa de Europa o conquistar una liga en 1959 y la UEFA en 1980. Pero en estos tiempos, la entidad ha dejado las grandes aspiraciones para centrarse en mantener la categoría, algo que no se ha logrado en el Commerzbank Arena. El equipo francfortés afrontaba la campaña sabiendo que debería sufrir y pelear como lo ha hecho en los últimos años. Así, se fichó un delantero referencia para intentar lograr la permanencia, el trotamundos griego Theofanis Gekas.

Durante las 17 primeras jornadas, las cosas funcionaron de forma sobresaliente. Tras un inicio dubitativo con cuatro derrotas en cinco partidos, el equipo encadenó una racha de siete encuentros sin perder. Se hablaron maravillas de este equipo que apostaba de la mano de Michael Skibbe por el buen fútbol. Gekas se hartó de marcar goles, 14 en su cuenta al final de la primera vuelta. Además, los ojeadores se fijaron en jóvenes futbolistas que dieron una gran imagen como el lateral griego Tzavellas, el defensa Sebastian Jung o el medio centro Pirmin Schwegler. Tan bien iban las cosas que ni el Borussia Dortmund les pudo ganar en su feudo en el último partido antes de navidades. Los 26 puntos con los que se fueron al parón invernal no predecían lo que al final acabaría ocurriendo. De hecho, entre los aficionados había ilusión por volver a Europa, que estaba tan solo a tres puntos.

Una ilusión que en cuatro meses se transformó en pesadilla. La vuelta de las vacaciones no pudo ser peor para el Eintracht, como si el equipo hubiera cambiado radicalmente, el juego alegre y eficaz se transformó en un estilo descoordinado y espeso. La ventaja que tenía respecto al descenso se fue agotando a medida que llegaban los malos resultados. Una racha de diez partidos sin ganar fue cortada por un triunfo contra el St. Pauli en el Commerzbank, pero este resultado fue insuficiente ya que los rivales de atrás llegaban apretando y con más ánimo que los de Frankfurt. Después lograron sacar sendos empates contra Wolfsburg y Werder, que si no les beneficiaban demasiado, al menos evitaban que sus rivales directos se distanciaran.

Pero todo el coraje que intentaron poner en las últimas jornadas no les sirvió de nada, el Borussia Mönchengladbach les sobrepasó en la tabla y les metió en descenso directo a segunda, de dónde no salieron. Se tuvo una ligera esperanza en la última jornada, cuando en Dortmund fueron ganando durante unos minutos y Wolfsburg perdía en Hoffenheim, algo que solo fue un espejismo. Finalmente, el Eintracht cayó en el Signal Iduna Park y firmaba su descenso, un hecho que se estaba masticando durante toda la segunda vuelta. Ni siquiera Gekas fue el mismo de los primeros meses y ni Skibbe ni Christian Daum, quién se hiciera cargo del equipo en el último tramo, pudieron recuperarlo. Ahora el objetivo es prioritario y una obligación, volver a primera que es para sus aficionados, dónde deben estar por historia.

Clasificación: 17º con 34 puntos

El once de gala