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jueves, 15 de mayo de 2014

HSV 0-0 Greuther Fürth. Se nota el miedo a perder

Jugarse toda una temporada a dos partidos en una situación cuanto menos angustiosa. En Hamburgo hay miedo al descenso, pero un miedo distinto a otros equipos, ya que sería una situación inédita en su historia y que le haría daño en lo económico. Por eso la afición rothosen se concentró para dar todo el apoyo al club. Así se presentaba en la relegation el conjunto de Slomka, con el prestigio de su legendaia historia en la mano. Más modesta es la historia del Greuther Fürth, equipo al que vimos la temporada pasada jugar en Bundesliga y que después de su descenso, quiere repetir la aventura en la élite del fútbol alemán y no pagar la novatada. Con toda la responsabilidad saltaron las dos formaciones al césped del Imtech Arena, que presentaba un aspecto extraordinario, alrededor de 56.000 personas, un millar que se desplazaron desde la francofonía bávara al norte del país. El primer contratiempo para el HSV le vino en el calentamiento, René Adler se lesionó y en su lugar entró el veterano Jaroslav Drobny, quien fue decisivo en el partido. Slomka hizo una revolución en defensa, Jansen y Westermann se quedaron en el banquillo y Jiracek con Diekmeier ocuparon los carriles. Mancienne, Djourou como centrales, Badelj y Tesche en el centro, el ataque conformado por Calhanoglu, van der Vaart, Rincón y Lasogga. 

Augen zu und durch: Kopfballduell zwischen Hamburgs Mancienne (r.) und Djurdjic

Frank Kramer decidió no arriesgar y sacó a Hesl, Giesselmann, Röcker, Mavraj y Brosinski en defensa. En el centro si hubo novedades con la pareja Sparv, Füsrtner, Babá adelantado, Stieber por la derecha y el ataque con Azemi y Djurdjic. La apuesta de los tréboles fue mejor en la primera parte ya que dominaron a su rival y generaron más peligro. El SpVgg se mostró sólido atrás y maniató el centro del campo que a penas dejó aparecer a Calhanoglu y van der Vaart. Drobny intervino en la ocasión más clara, Azemi rompió en el área a Mancienne y su disparo lo sacó el portero checo con la pierna a córner. Se volverían a encontrar los mimos protagonistas antes del descanso, pero Drobny volvió a estar acertado. El Fürth salió con la misma idea en la segunda parte y apretó en ataque, pero sin premio. Hesl a penas tuvo que intervenir, pero cuando le llegaron con peligro tuvo un susto y del bueno. La ocasión local vino en el 67, cabezazo de Lasogga que fue dentro, pero el árbitro invalidó la jugada por fuera de juego cuando ya todo el campo cantaba el gol. No hubo más ocasiones que destacar en un partido más tenso que entretenido. Todo quedará para la vuelta, 90 minutos en el Trolli Arena que decidirán, este domingo, el 18º equipo que completará el cuadro de la Bundesliga 2014-2015. 

Autor: @lodani7
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