Y se consiguió la remontada, que mal terminó la ida en Do Dragao y como se le dio la vuelta a la situación.
Podrían decirse varias palabras que resumieran una primera parte soñada, pero todas significarían lo mismo. Ciclón, apisonadora, vendaval, terremoto o furia. Un Bayern que salió cabreado con ganas de remontar y no tuvo piedad de un Porto que solo pudo ver como les pasaban por encima. A pesar de las significativas bajas que continúa teniendo Guardiola, el once tenía suficientes garantías para lograr el objetivo. Neuer en puerta, Bernat, Badstuber, Boateng y Rafinha en defensa. Trivote en la medular con Xabi Alonso, Lahm y Thiago Alcantara, meintrtas que el ataque quedaba conformado por Müller, Götze y Lewandowski. El balón comenzaba a rodar en un repleto Allianz Arena y sin perder el tiempo, la maquinaria se puso a cocinar el primer gol. Parecía que el Porto pondría mayor resistencia según lo que se veía en los primeros minutos, todo el equipo de Lopetegui con la misión de destruir el juego ofensivo del Bayern. Lewandowski avisó en una primera doble ocasión, Fabiano le sacaba el balón a Müller y el rechace del artillero se fue a la madera.
(the guardian)
Pero el chollo se les acabó a los 14 minutos, Thiago Alcantara, autor del vital gol en Do Dragao, repetía en un testarazo imparable con un centro maravilloso de Bernat. La conexión española daba sus frutos y empezaba a consumar la remontada. Ocho minutos después llegaba el 2-0 que daban la ventaja a los alemanes, jugada ensayada en un córner que terminaba con Boateng rematando lejos de Fabiano. La fiesta no paraba y cinco minutos más tarde era Lewandowski quien también de cabeza lograba el tercer tanto. El Porto no sabía como frenar la sangría y para cuando se daba cuenta, ya volvían a tener a los jugadores del Bayern merodeando el área. El 4-0 llegó en el 36, la jugada tuvo un gran componente de fortuna ya que el disparo de Müller rebotó en Martins Indi y Fabiano no estuvo acertado para despejar. Lewandowski volvería a marcar antes del descanso, robo de balón de Lahm, Müller se la cede al polaco que con pierna diestra cruza el balón y establecía la manita.
La segunda parte fue totalmente diferente a la primera. La quinta marcha que propulsó el Bayern se bajó a primera, y el ritmo consecuentemente también, lo que permitió ver un juego más igualado. El sexto pudo caer en un latigazo de Götze que se marchó fuera. Los portugueses lograron que la fiera se calmara y poco a poco trataron de tirar de orgullo para anotar un gol que diera una ligera luz de esperanza. Al final lograron el objetivo y Jackson Martínez recortaba distancias en el 73, lo que generó algo de inquietud en la afición bávara. Más murmullo cuando le propio Jackson perdonaba el 5-2 ante Neuer, era el momento de más agobio. Pero el Bayern supo dominar la situación con posesión. Marcano era expulsado con roja directa a falta de tres minutos para el 90 por una falta sobre Thiago. En esa misma falta, Xabi Alonso transformaba con elegancia el 6-1 que ya dejaba, por si no lo estaba ya, resuelta la eliminatoria. Remontada y objetivo cumplido, el Bayern estará en Semifinales, ya quedan menos para la final de Berlín.
Como siempre genial crónica
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