Otra prueba para calibrar

Ya hay lista oficial para la Eurocopa, el seleccionador Joachim Löw ha dado a conocer los cuatro descartes: Draxler, Cacau, Sven Bender y Marc Andre ter Stegen no acudirán a la cita. Por tanto, la suerte está echada y los 23 elegidos deberán dejar el honor de Alemania en lo más alto de Europa. Aunque antes de partir a la sede de la competición, la Mannschaft tendrá la oportunidad de experimentar su estado contra Israel en Leipzig. Parece cosa del destino, un día después de que el Presidente alemán Joachim Gauck visitara por primera vez el estado israelí, y es que ya sabemos la relación histórica de estos dos países a lo largo de la historia, participes de uno de los hechos más negros que la humanidad ha dejado. Con ganas de hacer frente a ello, de dejar el mal recuerdo atrás y mostrarle al mundo que hoy nada se parece a lo acontecido entre 1939 y 1945. Así, es el amistoso del cambio, del cambio social y del cambio futbolístico, el que debe reafirmar a Alemania en la élite del fútbol. El desastre en Suiza hay que borrarlo de la imagen y Löw debe recuperar a la selección que nos maravilló durante la fase de grupos y amistosos de nivel contra Brasil u Holanda en el último año.

A diferencia del choque en Basilea, esta vez si se podrá contar con los futbolistas del Bayern, todos excepto Schweinsteiger por molestias derivadas de la final de Champions. El once que podrá sacar el técnico podría ser el que salga a escena contra Portugal el próximo día 9 en Lviv. Aunque lo que la gente espera de este partido son más probaturas de cara a posibles contratiempos y a lo que se pueda encontrar a lo largo del torneo. La defensa será el punto fatídico, Löw llegó a desesperarse el sábado tras los muchos errores que cometieron la pareja Hummels-Mertesacker. El único fijo en el esquema defensivo es Lahm, así como Neuer en la portería, el resto son incógnitas. El centro del campo parece destinado al dúo Khedira-Schweinsteiger, pero con la baja de este último para el encuentro de hoy, las alternativas podrían ser Kroos o Götze. Mientras el ataque que más esperan los germanos es el compuesto por Müller, Podolski, Özil y Mario Gómez. De todos modos no sería extraño ver aparecer a Reus o Schürrle en el once del Zentralstadion. Veremos por quienes opta el director de la orquesta y si consigue recuperar el optimismo antes de viajar a Ucrania.