Un matagigantes sin premio

No todos los equipos de la Bundesliga pueden presumir de haber puntuado en campos como Hamburgo, Leverkusen, Bremen, Stuttgart, Gelsenkirchen o Wolfsburgo, y a muchos de ellos, ganarles en casa. El FC Nürnberg lo ha logrado este año contra todo pronóstico, al tratarse de equipos con mucho más presupuesto y con capacidad para estar luchando por los puestos de arriba. Con buenos resultados en estos campos, todo podría indicar que terminaron el año en los primeros puestos, pero se quedaron a las puertas de la zona europea. Pese a todo, magnífica temporada de un equipo, el granate, que ha sorprendido a muchos por tratarse de un conjunto destinado a sufrir por la permanencia, pero que ha terminado peleando por la quinta plaza. Y eso que la temporada despertaba muchas dudas en el Easy-credit Stadion, con jugadores muy jóvenes cedidos y otros futbolistas con experiencia cuyo rendimiento era una incógnita.

Dieter Hecking apostó desde el inicio por los jóvenes, que no encontraron buen resultado al inicio pero dejaron detalles de su calidad. Al equipo le costó arrancar y la primera victoria en la quinta jornada contra el Stuttgart le dio un impulso moral muy importante en la confianza de los futbolistas. Consiguieron cuatro triunfos en casa seguidos, contra rivales de entidad como el mencionado Stuttgart, Schalke, Wolfsburg y Köln, y también en el Werserstadion. Curiosamente, el Nürnberg erraba en los campos de rivales de la zona baja. En el derbi bávaro contra el Bayern, el equipo perdió de forma contundente y lo arrastró en las siguientes jornadas, donde solo un punto en Hoffenheim fue el único resultado positivo pero la espinita se quitó con un gran resultado contra el Hannover, segundo en aquel momento. Tras la reanudación de la temporada en Enero, llego una mala noticia, la lesión de Ilkay Gündogan, el mediapunta y uno de los jugadores más importantes del equipo. El jugador turco había sido fundamental junto a Schieber y Ekici en el ataque de los granates.

Pero este contratiempo no afecto al rendimiento del Nürnberg que poco a poco fue acercándose a Europa. Le ganó al Hamburgo y al Bayer Leverkusen, después en Stuttgart de forma contundente. Golearon al Eintracht y al St. Pauli y sacaron tajada del Volkwagen Arena. El Nürnberg no solo ganaba, sino que aplastaba a sus rivales con un estilo alegre y sin complejos. Además, Hecking necesitó cubrir las bajas de Gündogan y Schieber, quien estuvo lesionado cerca de dos meses, pero encontró sustitutos de garantía como el israelí Cohen o el joven eslovaco Robert Mak. Cuando el equipo logró tener a tiro la quinta plaza, llegaron los malos resultados y el fortín del Easy-credit se disolvió. Tan solo una victoria y dos empates en las últimas ocho jornadas hicieron que Europa se alejara. No se consiguió el premio, pero la afición del Nürnberg despidió a los suyos con alegría por haberles hecho disfrutar. El equipo se verá muy trastocado en verano por las marchas de jugadores importantes, pero en la ciudad bávara esperan que el espíritu siga y poder repetir una temporada como esta.

Clasificación: 6º con 47 puntos

El once de gala