Después del desastre en Hamburgo, todos preveían un partido más reñido e igualado en San Petersburgo. El Zenit, con sus millones y jugadores de alto nivel, daba más miedo antes del partido que durante la disputa del mismo, ya que se convirtió en una marioneta del Borussia Dortmund que enseñó su mejor versión ofensiva. Dos minutos, concrétamente entre el 4 y el 6, pusieron muy favorable la eliminatoria, y luego fueron dos contras de Lewandowski las que han puesto muy de cara los cuartos de final. El partido solo tuvo un color, el amarillo, que se impuso durante los 90 minutos. Tan solo el Zenit tuvo dos intentos de reacción, pero que no dejaron tiempo para la duda, ya que rápidamente fueron disueltas las dudas. Klopp puso en el Petrovski el siguiente once: Weidenfeller, Piszczek, Sokratis, Friedrich, Schmelzer en defensa, Nuri Sahin y Kehl en el centro del campo, mientras el ataque fue para Grosskreutz, Mhkitaryan, Reus y Lewandowski. El BVB se encontró enseguida con una ventaja de 0-2. A los cuatro minutos, el armenio Mhkitaryan recoge un balón en el área después de un sprint de Reus y marca a placer. Inmediatamente después, el armenio cuelga un balón en el área y Grosskreutz cede a Reus para que hiciera el segundo.
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En un visto y no visto, la eliminatoria quedaba encarrilada. El equipo amarillo se dedicó a controlar el balón mientras el Zenit apenas inquietó a Weidenfeller. Pero la segunda parte fue más entretenida. Los rusos se echaron adelante sin nada que perder y ya con el resultado muy desfavorable. En el 57, primer intento de remontada, tras muchos rechaces en el área es Shatov quien acababa con la raacha de cero goles de los equipos locales en estos octavos de final. Pero ni cuatro minutos habían pasado del 1-2 cuando apareció la figura de Lewandowski para finalizar una internada hasta la cocina de Piszczek. La connexión polaca dio sus frutos, pero de nuevo el Zenit quiso discutir la ventaja. El colegiado escocés Collum decretó penalti riguroso de Piszczek sobre Faizulin y Hulk envió el balón donde era imposible parar la pena máxima. Pero si en la anterior reacción local, tardaron cuatro minutos, en esta solo uno. Contra ganada por el BVB y en superioridad numérica, Reus ve a Lewandowski que no perdona en el área. El 2-4 dejó sin capacidad de una nueva reacción al Zenit, mientras que los alemanes dieron por bueno el resultado. Un 2-4 que debería ser definitivo para ver a las abejas en cuartos de final.
Autor: @lodani7
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