La salchicha mecánica

No, no imaginen nada extraño, hablaremos del Eintracht de Frankfurt, que hoy por hoy es la revelación del campeonato vistos los últimos pinchazos del Mainz que hasta el momento se había llevado todos los flashes. Así es, el equipo del águila se ha desmelenado, un conjunto que sobre el papel debería aspirar a salvarse sin demasiados apuros. Pero la Bundesliga se ha propuesto llevarle la contraria al destino y elevar a los equipos humildes a costa de los proyectos económicos a largo plazo y los prestigiosos clubes europeos. Así, en Frankfurt empiezan a recordar los más viejos del lugar aquella gran escuadra que consiguió alzarse con la copa de la UEFA en 1980 y que peleaba contra los grandes por las posiciones europeas, unas posiciones que no ocupa desde el año 2006. Desde luego hay ganas de soñar en una de las ciudades más importantes de Alemania y parece que este puede ser el año elegido para hacer cosas importantes.

La base de este logro hasta el momento está en un ataque explosivo donde el griego Theofanis Gekas ha asumido su rol goleador. Nada menos que once tantos en las once jornadas disputadas lleva el ex jugador del Hertha, Bochum y Bayer Leverkusen, una cifra asombrosa para el rendimiento mostrado en las últimas campañas por el delantero heleno, aunque si bien es cierto que en la primera experiencia en Alemania consiguió anotar 20 goles con la camiseta del Bochum. Sus cifras han apartado del equipo al otro compatriota en esa posición, Ioannis Amanatidis, que venia jugando en las últimas campañas. Llamativa sin duda es la relación del Eintracht con los jugadores balcánicos ya que otro jugador griego se ha adueñado de la banda izquierda como es Tzavellas, además de contra con dos jugadores macedonios; el portero Oka Nikolov, que lleva casi una vida en el Commerzbank-Arena (16 años) y Aleksandar Vasoski, que también lleva mucho tiempo en la ciudad de la Hesse.

Lo que parece indiscutible es que plantilla hay para pelear por un puesto en la Europa League, pero los fantasmas de temporadas anteriores habían hecho decrecer la esperanza en las águilas rojas. No obstante, el gran fútbol desplegado contra uno de los mejores conjuntos de la Bundesliga como es el Wolfsburgo ha reanimado, si no lo estaba ya, una apagada hinchada que empieza a creer de nuevo en el equipo dirigido esta temporada por Michael Skibbe. El ambiente ha llegado de nuevo a las gradas del coliseo francfortés y el espíritu de aquel equipo que logró ganar la competición alemana en 1959 y conquistar 4 copas alemanas entre 1974 y 1988. Jugadores en forma como los nombrados anteriormente y los Franz, Ochs, Chris, Schwegler, Caio y compañía tienen en sus manos la ilusión de una afición acostumbrada a sufrir en los últimos años. Veremos como discurre la temporada de uno de los clubes con más historia de los que componen la Bundesliga actual.

Autor: Dani García
Correo: lodanigranota@hotmail.com