Klopp conquista Maguncia

Ayer fue un día de esos en los que todas las miraban se concentrar en un solo rectángulo de juego y donde cada acción es analizada con una minuciosidad enorme. El estadio Am Bruchweg se vistió de gala porque la ocasión lo merecía, era un duelo entre el primer y el segundo clasificado, pero con dos conjuntos que no entraban en las quinielas para jugar un encuentro tan trascendental. Llenazo hasta la bandera y solo faltaba el espectáculo de los dos equipos más excitantes de este arranque ligero en una apasionante Bundesliga. Jürgen Klopp regresaba a la que fuera su casa como jugador y donde empezó a foguearse el mito de este peculiar entrenador y su visita fue muy alagada por los aficionados locales al principio, pero no al final ya que el Borussia Dortmund ganó el gran partido de la jornada. Sobra decir que la afición de las avispas tampoco dejó de lado a su equipo en estos momentos tan especiales en la ciudad de la Westfalia.

Una victoria dura, sufrida pero que recordó a las mismas conseguidas por otros equipos que acabaron coronándose campeones nacionales. Un planteamiento inicial de presión en todas las líneas y salidas veloces desde el centro del campo para cogerle las espaldas a una siempre adelantada defensa del Mainz. Así se desarrolló en inicio del encuentro donde el BVB dispuso de claras ocasiones para marcar pero ni Barrios ni Kagawa estuvieron acertados delante del portero Wetklo. No fue hasta la media hora de partido que llegó el primero de la tarde, el joven de 18 años Mario Götze recogió un balón en la frontal y con mucha facilidad introdujo el balón por la derecha del portero local, justo premio para unos brillantes primeros minutos de las avispas. Jarro de agua fría para una afición enfervorecida que vio como poco después Wetklo salvaba el segundo a disparo del lateral Schmelzer.

Tras el descanso, el Mainz salió a intentar corregir los errores de la primera parte y lograr un empate rápido. Subotic cometió un absurdo penalti sobre Adam Szalai que el ex jugador del Getafe Eugen Polanski no pudo materializar en la portería de un seguro Weidenfeller. Se perdía así una oportunidad de oro para lograr el empate justo al inicio de la segunda mitad. Pero en este mundo se dice con mucha certeza que quine perdona lo termina pagando y ayer no fue la excepción. Lucas Barrios se rehizo de un error en los primeros minutos y logró el segundo tanto en jugada sensacional del equipo amarillo, su tanto numero cinco en esta temporada. Se acababa con este segundo gol toda la emoción ya que la defensa del BVB no permitiría regalar ninguna ocasión a los locales que pese a todo, recibieron el cariño de su público. Klopp regresó a su casa para ser líder con otro equipo y si siguen así, estamos ante un conjunto que opta a hacer grandes cosas.

Autor: Dani Garcia

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