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martes, 30 de septiembre de 2014

El Bayern sabe sufrir en Moskow y el Schalke no pasa del empate en casa

CSKA Moskow 0-1 FC Bayern München 

No fue un partido para grabar ni para que se acuerden los aficionados a final de temporada, pero si que sirve al Bayern para sumar otros tres puntos muy importantes que dejan muy de cara la clasificación a octavos. Un desangelado Khimki Arena, por sanción de la UEFA, hacía presagiar que el duelo le faltaría algo, pasión propia de un partido de Champions. El Bayern llegaba a este duelo en línea ascendente, ya líderes de la Bundesliga, necesitaban esta victoria para dejar claro quien domina el grupo E. Los primeros compases del partido tenían poco ritmo, pero si avisos en las dos porterías. El CSKA logró que los jugadores decisivos del equipo bávaro no se sintieran cómodos, Robben no encontraba espacios y Götze era perseguido en cada paso por un jugador, mientars que Lewandowski apenas aparecía. Pero en el 22 el único despiste de los locales en la primera parte propicio el gol. Mario Fernandes derribó a Götze en el área y el ábritro decretó penalti, Thomas Müller engañó a Akinyeev y 0-1. Los rusos despertaron y llegaron a generar peligro, Eremenko estrelló un balón en la cruceta y Tosic era un incordio cuando se acercaba por el área. Musa también la tuvo en la segunda parte, pero Neuer no iba a permitir el empate. En la recta final, dos ocasiones para sentenciar, Müller y Lewandowski se encontraron con el guardameta del CSKA, muy atento en ambas jugadas. Sin embargo, el Bayern supo sufrir y anestesiar el partido hasta el final. Seis puntos y los octavos a tiro de piedra. 

Die Bayern-Stars bejubeln Müllers Tor zum 1:0

FC Schalke 04 1-1 NK Maribor

Punto que sabe a poco para el Schalke ya que recibía al que teóricamente es el rival más flojo del grupo, aunque demostró el Maribor no ser un rival sencillo. La primera parte fue más bien aburrida, el equipo de Keller apenas se aproximó por la portería de Handanovic, juego muy trabado y lleno de imprecisiones en ambos conjuntos. La falta de ritmo parecía beneficiar a los eslovenos y así se plasmó con le paso de los minutos hasta llegar el 0-1. El lateral izquierdo Viler se encontró un pasillo por su banda y dio el pase para que de segunda línea Bohar marcara un gol sorpresivo y qu ebien celebraron los 300 aficionados del Maribor en el minuto 37. Después lo peores momentos para los mineros, que vieron como el ímpetu de su rival a punto estuvo de aumentar las diferencias. El Schalke se veía obligado a salir con más fuerza e intensidad en la segunda parte. Con las líneas adelantadas y más presión sobre la defensa rival, degeneró en el empate. Pérdida de un jugador visitante que llegó a Huntelaar y el killer holandés transformó el regalo sin ponerse nervioso, desde la frontal del área. Desde el gol hasta el final, solo dispuso una ocasión más para intentar la remontada, fue de Draxler, pero no logró batir al portero Handanovic. Los eslovenos resistieron el empate e incluso dispusieron de un par de contras peligrosas para llevarse la victoria. Dos empates encadena eel Schalke, con distinto sabor, y ahora le vendrá un doble partido vital contra el Sporting de Portugal. 

Julian Draxler (M.) wird von Aleksander Rajcevic (l.) und Ales Mejac gestoppt

Autor: @lodani7 
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