En los últimos dias un holandés con poco pelo realiza diagonales en los campos de entrenamiento de la calle Säbener, en Múnich. Su nombre es Arjen Robben, y no creo que sea necesario dar muchos más datos sobre el, ya le conocemos, fue la base del Bayern en la temporada anterior, sus goles en momentos decisivos (Florencia, Manchester, Gelsenkirchen, Bremen...) fueron importantísimos para completar la casi perfecta temporada 2009/2010 de los bávaros.
Ese holandés ha vuelto a correr y a tocar el balón después de que una terrible lesión le apartase de toda la primera vuelta en la presente campaña. Llegó a la final del mundial con su pais tocado, y el forzar para jugar tan importante evento le rompió por completo. Hoy, y tras meses de recuperación, Robben ya ve la luz al final del túnel.
Se puede considerar al extremo holandés como unos de los mejores jugadores del mundo en su posición, pero siempre ha tenido un pero, su fragilidad, lo que ha llevado a que algunos le apoden el hombre de cristal.
En el Fc Bayern, Arjen ya ha tenido dos lesiones importantes, la primera nada más llegar al club, que le impidió estar al 100% en bastantes partidos del comienzo de liga y de la fase de grupos de la Champions en la pasada temporada. La segunda, la que aún le tiene apartado de los terrenos de juego.
Pero Robben vuelve pronto (concretamente en Enero), de echo es bastante probable que sea de la partida en Wolfsburgo, primer partido de liga para los sureños tras el parón invernal.
Su velocidad, regate, y esas maravillosas diagonales podrán ser disfrutadas de nuevo por los hinchas del "Rekordmeister", sin duda el "fichaje" de invierno que necesita el Bayern para afrontar una dura segunda vuelta en la que la presión para este club va a ser muy alta. Esperemos que tenga suerte, y que el cristal no se vuelva a romper...
Andy Porcel (andy319-332-3@hotmail.com)
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