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jueves, 16 de septiembre de 2010

Se necesita mejorar para pasar

Malas sensaciones para Schalke y Werder Bremen en esta primera jornada de la UEFA Champions League donde solo Bayern pudo dejar el pabellón bien alto, a pesar de las dificultades que tuvieron los de Van Ghal para imponerse a la Roma de Claudio Ranieri. Un empate en casa y una derrota fuera son el balance de un arranque de competición  que se preveía complicado para los representantes de los que nos ocuparemos a continuación, el Werder en el famoso grupo de la muerte y el dubitativo Schalke, que sigue sin ser capaz de sacar algo positivo en sus partidos. Una jornada goleadora con 44 tantos y muchos detalles que acompañan siempre a la prestigiosa competición europea, había ganas de escuchar la sintonía de la Champions y no decepcionó, a pesar de que los resultados no acompañaron a nuestros representantes alemanes.

Del primero, el Werder de Thomas Schaaf, habrá que destacar las dos caras que mostró contra el Tottenham Hotspur, una cara pésima en la primera parte donde evidenció errores en defensa. Los goles del conjunto londinense llegaron en jugadas donde los centrales no supieron marcar bien por arriba. Pero este Werder es especialista en remontar partidos que se ponen cuesta abajo y con el mismo espíritu de Genova se echaron descaradamente arriba para neutralizar la desventaja de 0-2 en el marcador. Almeida peino un centro desde la banda izquierda para batir antes del descanso al portero Gomes y ya en la segunda parte, Marko Marin realizó una extraordinaria para introducir el balón en la portería tras un buen disparo desde la frontal del área. Un empate en definitiva que obliga al Werder a puntuar en uno de los tres desplazamientos.

Menos suerte todavía tuvo el Schalke de Felix Magath en el estadio Gerland de Lyon donde cayó por la mínima contra un Olympique que supo sacarle rendimiento al único gol del encuentro. Pero lo peor del encentro fueron las malas sensaciones que dejaron los de Gelsenkirtchen, con un estilo algo ramplón y sin ideas en ataque, Raúl desapareció del encuentro. A colmo de males, el defensa Höwedes fue expulsado y se perderá el próximo encuentro que cobrará una dimensión aún mayor ya que el rival será el Benfica de Jorge Jesús, probablemente el equipo con el que deberá disputarse la segunda plaza. Magath ya no sabe que hacer para hacer funcionar un equipo que ha fichado bien, pero que no se acomoda en el terreno de juego, veremos si en las próximas citas encuentra los resultados y el buen juego. La próxima cita, en dos semanas con el Schalke-Benfica, el Inter-Werder y el Basel-Roma.


Autor: Dani Garcia
Correo: lodanigranota@hotmail.com

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